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Meghan Markle y el Príncipe Harry han anunciado el nacimiento de su segunda hija, una niña llamada Lilibet «Lili» Diana Mountbatten-Windsor. La pareja compartió la noticia en su sitio web oficial, declarando que Lili nació el 4 de junio en el Hospital Cottage de Santa Bárbara en California. Lili lleva el nombre de su bisabuela, la Reina Isabel II, cuyo apodo familiar es Lilibet, y de su difunta abuela, la Princesa Diana.

El Duque y la Duquesa de Sussex expresaron su alegría y gratitud por el apoyo que han recibido desde que anunciaron su embarazo. También agradecieron a quienes les enviaron buenos deseos por respetar su privacidad durante este momento especial. La pareja compartió que Lili y Meghan se encuentran bien de salud y se están adaptando en casa.

La llegada de Lili se produce apenas unos meses después de que Meghan revelara que había sufrido un aborto espontáneo en julio de 2020. En un emotivo ensayo, Meghan habló sobre el dolor y el duelo que experimentó, con la esperanza de romper el silencio en torno a los abortos espontáneos y alentar a otros a buscar apoyo.

La noticia del nacimiento de Lili ha generado mucha emoción y celebración entre los seguidores reales y quienes les desean lo mejor. Muchos han recurrido a las redes sociales para enviar sus felicitaciones y expresar su alegría por la familia en crecimiento. Lili ahora ocupa el octavo lugar en la línea de sucesión al trono británico, después de su hermano mayor, Archie.

La decisión de Meghan y Harry de nombrar a su hija Lilibet tiene un gran significado, ya que rinde homenaje tanto a la Reina Isabel II como a la Princesa Diana. Lilibet era un apodo de la infancia de la Reina, utilizado por sus familiares cercanos. La elección de Diana como segundo nombre honra a la querida madre de Harry, quien falleció trágicamente en 1997.

El anuncio del nacimiento de Lili por parte de la pareja marca otro hito en su trayectoria mientras continúan construyendo una vida lejos de la familia real británica. Meghan y Harry se retiraron como miembros senior de la familia real a principios de 2020, buscando independencia financiera y una vida más privada. Desde entonces se han mudado a California y han estado involucrados en diversos esfuerzos filantrópicos.

El nacimiento de Lili es una ocasión alegre para Meghan, Harry y sus seres queridos. Representa un nuevo capítulo en sus vidas mientras abrazan las alegrías y desafíos de la paternidad una vez más. La dedicación de la pareja a sus hijos y su compromiso de hacer un impacto positivo en el mundo continúan inspirando a muchos.